Sabías que Juana de Arco comenzó a los 13 años con manifestaciones típicas de una Epilepsia Focal del lóbulo Temporal Lateral con fenómenos auditivos, asociado con un posible origen autoinmune por anticuerpos LGI-1. Según su testimonio, escuchaba voces divinas como la de Dios y del arcángel San Miguel. Las crisis iniciaban con sensación de miedo (aura temporal típica) seguido de una intensa luz que precedía a las revelaciones (propagación a otras áreas asociativas), entonces escuchaba una voz divina (alucinación auditiva) que en ocasiones podía visualizar (alucinación visual).
Inicialmente le decían con voz protectora que asistiera a misa y fuera piadosa, pero posteriormente le encomendaron la misión de coronar al Delfín Carlos VII. Con solo 17 años lideró el ejército francés para liberar de los ingleses a la ciudad de Orleans durante la Guerra de los 100 años, pasando a la historia como la Doncella de Orleans (…Dios mismo me envía, dame un ejército y expulsaré a tus enemigos y te conduciré hasta Reims para tu coronación...).
Cuando es capturada por los ingleses, estos temían terminar con su vida debido a que afirmaba era enviada por Dios, pero aceptar dicha comunicación divina significaba que el mismísimo Dios favorecía al ejército francés, por lo que fue torturada y abusada en su celda. Finalmente se condenó por herejía al vestirse como hombre y portar armas. Con 19 años ardió tres veces en la hoguera y sus cenizas fueron arrojadas al Sena. Medio siglo después fue revisado su juicio, exonerándola de los crímenes. En 1909 fue beatificada por el Papa Pio X y en 1920 canonizada por Benedicto XV, siendo desde ese entonces la Santa Patrona de Francia.
Actualmente se propone un componente reflejo de tipo musicogénico en sus crisis epilépticas, puesto que se provocaban cuando sonaban las campanas de la catedral. El área epileptogénica de este subtipo de epilepsia suele localizarse a nivel temporal derecho y en estudios de RM funcional se ha observado, instantes antes de iniciar la crisis, una activación en bola de nieve de los circuitos límbicos (responsable del control emocional).
Dado que este tipo de Epilepsia tiene un componente genético, investigadores italianos están tratando de analizar su ADN, pues si bien sus restos físicos desaparecieron en la hoguera, la heroína francesa acostumbraba a sellar con cera sus cartas dejando la huella de su dedo y un cabello para asegurar su identidad.
